salía cansado de un hotel, una casa o algo similar; era de noche y el frío y la oscuridad me invitaban a dormir
no encontraba refugio ni tampoco recordaba dónde era mi hogar, y entonces surge la necesaria y disparatada idea: iré a dormir a casa de mi compañera especial
fuimos algo más que amigos pero poco menos que nada más, aunque tampoco parecía importarnos… o eso decíamos
llego a su portal, abro la puerta, subo por el ascensor y penetró en su hogar; en un primer vistazo no oigo ni siento nada, solo diviso mi dormitorio donde dormía de adolescente allá en la tierra que viera nacer
vuelvo a penetrar en el umbral de la habitación, me recuesto y caigo profundamente dormido
con las primeras luces del alba despierto, miro hacia el dentro y me percato que hay otro hombre en el dormitorio principal acostado con ella
se levanta él: cordial, amable, sereno y me pregunta y yo respondo quién y qué relación me unía a ella (tampoco parece afectarle demasiado)
mi compañera se une a la conversación y manifiesta (y puntúa) su relación con su pareja: de 2 a 8, en una valoración que jamás (porque despierto antes) intuyo a qué facetas de la relación se refieren
salgo del domicilio y la borro del whatsapp
En fin:)
Y así pasa con los amigos con derechos
al principio iba derecha, luego se torció y al final, todo blando
XD